La que ha liado Fernando Trueba lanzando al aire un anatema cual es el sentimiento patrio. En uno de sus Episodios Nacionales, don Benito Pérez Galdós dice que el verdadero sentimiento patriótico de los españoles en defensa del suelo invadido por las tropas de Napoleón, fue cuando supieron que la tropa se estaba entendiendo con sus mujeres, siendo entonces cuando saltaron faca en boca dispuestos a degollar a la soldadesca invasora. Y es que el pueblo español podía soportar la crueldad de un rey como Fernando VII, la invasión de tropas extranjeras y la ocupación territorial por éstas, podía con todas esas muestras de oprobio y humillación pero, ay!! a la mujer de un español del pueblo no se la tocaba ningún franchute de aquellos, hasta ahí podíamos llegar.
A don Benito no le faltaba razón cuando dudaba de la dignidad de los españoles de entonces, sobre todo al ver cómo recibió el pueblo al rey felón Fernando a su regreso del "exilio" en Francia, retenido por Napoleón. El rey Fernando venía dispuesto, como así se vio, a deshacer toda la obra liberal de las Cortes de Cádiz, empezando por su Constitución y perseguir y fusilar a todos los contrarios a su monarquía absoluta. Recordemos que fuera de nuestras fronteras, primero en la Inglaterra del siglo XVII y después en la Francia de finales del XVIII, se decapitó a sendos reyes por traidores a su país, o a su pueblo, como se quiera. Carlos I y Luis XVI, no pudieron ver sus cabezas caer al cesto después de que se las hubieron cercenado. Pero no fue Fernando VII el único monarca traidor a España. Ya en 1923 Alfonso XIII, poniéndose la Constitución canovísta por montera, dio plenos poderes a un militar, el general Primo de Rivera, para que enderezase el país. Y nada se hizo en ninguno de los dos casos con los traidores y mucho menos cortarles la cabeza.
Y al hablar de montera, hay que recordar que en el reciente asunto del director de cine Fernando Trueba, ha sido precisamente uno de esos toreros, cantera inagotable de patriotas de bandera, tricornio y crucifijo, quien henchido de ardor patrio español, como un espontáneo en plena corrida, que ha saltado al ruedo, blandiendo estoque y crucifijo y puesto el grito en su cielo, sin duda para atacar al director al grito de "devuélvenos el dinero de la subvención". Patético el guapo torerito pero al mismo tiempo, coherente con sus valores, aun sin que sepamos si Trueba los comparte.
Lo que si es verdad es que, un somero repaso a la historia de nuestro país, sirve más que de sobra para que no afloren señas de españolidad, habiendo tenido reyes traidores, militares golpistas y traidores también, guardias civiles felones, con su inevitable tricornio acharolado "pret à porter" en cualquier etapa de la historia gobierne quien gobierne, etc.
Tal vez el director Trueba, estuviera pensando en alguna de estas características de nuestra raza para no sentirse español, lo que no le salva de su inoportunidad para manifestarlo, en eso sí que ha sido un auténtico cándido.